domingo, 29 de julio de 2012

 (Suman, mi director favorito, y yo)
Mi día ha empezado un poco regular. La verdad es que me he levantado bien pero a sabiendas que hoy era mi penúltimo día aquí. Volveré a recoger la maleta después de la semana de tour y antes de partir hacia el otro orfanato. También le he pedido a Suren y a Suman si puedo venir aquí los dos días antes de irme a España. En vez de irme al hotel, me gustaría más estar aquí. He dejado los niños en la escuela y me he ido a caminar, mi último paseo aquí. Lo he disfrutado muchísimo pero tenía los sentimientos muy a flor de piel, una cosa bestial. He vuelto con el cuerpo tibio y con un nudo en la garganta.

A la 1 Gita y yo nos hemos ido a por momos y pepsicola. Era mi comida oficial de despedida para con ella. La verdad es que ha estado super bien, Gita y yo creo que tenemos una conexión muy especial, me lo paso genial con ella, es una gran mujer. Después de la comilona hemos ido a buscar a Anita y a Sangham al colegio, la pequeña me ha dado la mano sólo verme y ha estado así todo el camino a casa, Sangham me la daba a ratos. Cuando hemos llegado al orfanato les he ayudado a hacer deberes y, al llegar los demás, ha salido el tema de que mañana me voy. Bijay estaba con una cara bastante triste, aunque hacía por estar bien, se le nota mucho. Anita, al poco, me ha venido con un dibujo y una carta para mí. Se ha puesto a llover un montón y Gita ha venido y me ha dicho que era Shiva llorando a cántaros porque me iba mañana. Kasturi me ha dicho que no me vaya, que me quede. Le he dicho que seguramente volveré antes de irme a España.

Todos han estado achuchándome mucho, muy conmigo. Me hace ilusión porque la mayoría llevan pulseras que hicimos y dicen que así se acordarán siempre de mí. A Bijay le he regalado una, que a él no le había hecho. Hari se ha quedado un poco mal y lleva toda la tarde así. Casi ni me habla. 

La verdad es que no sé cómo estoy. No sabría expresar mis sentimientos, no me veo capaz de hacerlo. Los echaré muchísimo de menos. Realmente son unos niños muy pero que muy especiales, algunos muy sensibles. De cada uno podría deciros algo. Me siento super conectada a ellos y creo (estoy bastante segura) de que esto no se acaba aquí. En fin, poco más por hoy. Voy a preparar kleenex para mañana. Ya os contaré cómo ha ido. Os deseo muy buenas noches, por última vez, desde al lado de la fábrica de PepsiCola.

1 comentario:

  1. Nada termina si hay algo que te lo recuerda. Es muy mediterraneamente-publicitario, pero es cierto. Ánimos :)

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